Cuando su abuelo murio, Juan permanecio sentado junto a su tumba durante
un mes. A los treinta dias, volvio a su casa y retomo su rutina como si nada.
Cada mañana Los Robles (3 hermanos) lo pasaban a buscar y hacian todo el
trayecto hasta la fabrica en silencio. Los robles sabian que Juan no les contaria
donde estuvo los treinta dias que desaparecio, asi que mejor se limitaban a
caminar con Juan al lado, cabizbajo, triste, solo con su dolor... asi era el.
Juan trabajaba en la fabrica igual que lo habia hecho su padre, su abuelo y
todos los que el conociera. De su padre no tenia recuerdos, murio cuando el
era niño. Y de su madre menos, lo abandono al nacer, y lo bien que habia
hecho, le machacaba el abuelo cada vez que podia.
Juan nunca recibio una caricia, ni un juguete, ni una golosina. Nunca salio a
jugar a la vereda, ni frecuento a otros chicos. Trabajaba desde los 14 años,
en la misma fabrica que se llevo a su padre y a su abuelo, y que tarde o
temprano se lo llevaria a el.
Sin embargo, una mañana la vio, hacia tiempo que soñaba con ella, pero
no siempre podia espiarla. Ahi estaba, frente a la puerta, radiante,
bellisima, camino hacia ella y...le dijo a Los Robles que se adelantaran,
y cuando apenas pudo distinguirlos, irrumpio en el jardin y la levanto
en andas, la llevo hasta la calle, la observo un momento, la monto
tambaleante y se dio impulso. La bicicleta se deslizo como flotando,
Los Robles lo vieron pasar como una exhalacion, lanzando alaridos de
jubilo.
Los Robles dicen que se perdio en la bruma, riendo.... Nunca mas se
supo de el.
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